A partir de abril, el escenario climático pasaría a un estado "neutro". Aunque aún falta mucho, las primeras proyecciones para el próximo ciclo indican que en septiembre volvería a aparecer La Niña.
Si bien no se espera una oferta de agua capaz de lograr un nivel de reservas satisfactorio, por sectores es razonable esperar rendimientos muy próximos a los normales.
El sistema ciclónico será el protagonista hasta el inicio de su retirada sobre la jornada del lunes.
La llegada de una perturbación a la zona sur pampeana sobre el día de ayer impuso condiciones de inestabilidad con el origen de precipitaciones aisladas.
La combinación de factores que anticipa el Servicio Meteorológico Nacional muestran que se pueden ajustar las reservas hídricas sobre el final de campaña e inicio de la siguiente.
Las reservas hídricas para la mayoría de los cultivos muestran un patrón con excesos hídricos para el centro-norte del país.
Las lluvias de la última semana de enero han sido muy generosas sobre las provincias de Córdoba y Santa Fe, en menor medida sobre el oeste entrerriano, donde no fueron tan generalizadas.
Se prevé que el aire tropical recupere rápidamente su posición sobre gran parte del país. Esto sumado al avance de un sistema frontal con fuerte contraste térmico, comenzará a generar tormentas.
Se espera que a lo largo de lo que resta del día las tormentas sigan viajando hacia el este noreste, es decir, tomando mayormente la Mesopotamia como área más homogénea a la hora del despliegue de precipitaciones.
Si bien durante el lunes se espera que se observen eventos aislados, el martes, las precipitaciones serían mucho más generalizadas e importantes.
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