Se registran pérdidas en la producción de verduras
El intenso calor ha sido devastador para la producción de lechuga, rúcula, acelga, radicheta, albahaca.
El presidente de la Asociación de Productores Hortícolas de Entre Ríos, Mario Bevilacqua, dijo que se perdió el 80 por ciento de las verduras de hojas finas por efecto del sol. Otro factor influyente fue la restricción en la importación de semillas.
La producción frutihortícola está sujeta en un alto grado a las circunstancias climáticas. La cantidad y la calidad de lo cultivado en las quintas depende de las temperaturas, las lluvias, el granizo, entre otros factores incontrolables por el hombre. Esta temporada “viene bastante complicada. El sol ha quemado los cultivos. Se ha perdido el 80 por ciento de las verduras de hoja fina” afirmó a EL DIARIO el presidente de la Asociación de Productores Hortícolas de Entre Ríos, Mario Bevilacqua.
El dirigente graficó la situación con su caso particular, “jamás en mi quinta me quedé sin acelga. Bueno, ahora, no tengo nada. El calor la arruinó” aseguró.
La situación ha generado el desabastecimiento de las verdulerías y el consecuente aumento de precios. “Al haber muy poca mercadería, los valores han subido. En este sector, el precio se regula por la oferta y la demanda. La acelga, la lechuga, la rúcula, la remolacha, la albahaca aumentaron”, dijo el productor. La excepción es el tomate que no trepó en su valor. La razón es que hay mucha cantidad dado que se ha traído desde otras provincias.
En el caso de la lechuga, otro factor que afectó la producción fue la imposibilidad de importar semillas. “Hoy estamos usando semillas alternativas pero las plantas son atacadas en mayor grado por las plagas, los insectos, los hongos y las bacterias”, expresó Bevilacqua.
A modo de síntesis, quien preside la Asociación de los productores hortícolas consideró que los cultivadores se encuentran a la deriva. “Productor que muere, no vuelve” dijo en sentido figurado. “El círculo de la producción frutihortícola se está cerrando. Esta es una realidad que no sólo afecta a Paraná sino a varias ciudades argentinas”, aseveró.
Respaldo
Bevilacqua considera que la situación de los productores podría mejorar si se trabaja en conjunto con el gobierno. Al respecto, dijo que han comenzado algunas charlas con la nueva gestión municipal.
En la primera reunión, realizada antes del receso, se expuso el hecho de que el cordón frutihortícola de Paraná ha quedado dentro del ejido urbano. “Es necesario que nos alejemos de la ciudad para tener perspectiva de crecimiento. Esto fue escuchado atentamente por el secretario de la Producción Municipal (Francisco Mathieu)” explicó Bevilacqua.
Otro problema que se abordó es que nada de lo que se encuentra en las góndolas de los hipermercados en relación a las frutas y verduras proviene de Paraná. “Todo viene de Santiago del Estero, Salta, La Plata, Mendoza, etc. Antes trabajábamos con los supermercados locales y tratábamos con los dueños” declaró el dirigente. También indicó que se debe mejorar el mercado concentrador El Charrúa. “Una posibilidad es conseguir un nuevo predio fuera del ejido de la ciudad”, dijo.
En relación a la posible reactivación de las ferias de la ciudad sostuvo que sería fundamental para el sector ya que se podría implementar la venta directa, lo que a su vez traería mejores precios para el consumidor final.
Al respecto, recientemente se conoció la noticia de que el Municipio está interesado en mejorar el mercado de Salta y Nogoyá. Al mismo tiempo, el Mercado Sud (en Villaguay y Perón) está siendo refaccionado a partir de un proyecto que comenzó en la gestión de Blanca Osuna.
A propósito de la situación de los productores, Mathieu había dicho que “vamos a diseñar políticas específicas para el sector. Como primera medida, levantar el nivel de compra local que es muy bajo” y que “la idea es trabajar fuertemente en ese sentido. Incorporar el compre local permitiendo soluciones desde lo comercial, desde lo más básico que sería incorporarlos en las ofertas de las ferias, hasta cuestiones más complejas como ayudarlos a que lleguen a puntos donde hasta hoy no han tenido acceso”.
De todos modos, Bevilacqua considera que las ayudas están muy retrasadas. En este sentido, dijo que desde hace dos años están necesitando del respaldo oficial. A modo de ejemplo, contó que el verano pasado gestionaron un subsidio nacional a través de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) y todavía no lo han podido cobrar.