Alertan que la chicharrita del maíz no se pega a las trampas
Alerta por la presencia de la chicharrita del maíz (Dalbulus maidis) en las plantas en determinadas zonas productivas, aunque creen que ya está en toda la provincia. "La chicharrita Dalbulus no se está pegando en las trampas", resaltó el Ing. Agr. Gabriel Busson, Coordinador de la parte agrícola de El Hinojo.
"Estamos viendo a nivel de campo la presencia de chicharrita en los lotes de maíz, se ven en las plantas. Pusimos trampas cromáticas, pero la chicharrita Dalbulus no se está pegando en las trampas" alertó a Momento de Campo el Ing. Agr. Gabriel Busson, Coordinador Agrícola de El Hinojo. En este sentido, explicó que en conversación con otros asesores de la zona buscan avisar porque "uno quería encontrarla dentro de la trampa y la realidad es que hay que verla a nivel de planta. La idea es alertar a todos de salir a aplicar, ya que la chicharrita está presente y los momentos de aplicación para que sea efectiva es hasta el estadio de V8 y los maíces se encuentran en V5 y V6. En dos semanas ya van a estar en ese estadio y no habrá posibilidad de accionar y hacer un control efectivo de la misma".
El profesional comentó que están observando la presencia del Dalbulus maidis en "la zona de Victoria, Hernández y Nogoyá, pero además tenemos comentarios que hay presencia en La Paz y Hasenkamp. Te diría que ya está en toda la provincia", dijo.
Al analizar los motivos de que la chicharrita no se está pegando a las trampas, Busson sostuvo que "la preferencia del insecto es estar en las plantas y no en las trampas. Quizás cuando haya mayor presencia la vamos a ver, pero probablemente será tarde. Al ser un problema nuevo, no estamos acostumbrados a monitorearla, la detección temprana es clave".
El Hinojo cuenta con alrededor de 5.000 hectáreas de maíz de segunda en esta campaña. "Habíamos achicado la superficie con maíz, porque la chicharrita nos pegó fuerte el año pasado. Como vimos que venía bien, que en las trampas de los distintos organismos, tanto de CREA como INTA, había bajado sustancialmente la población por las temperaturas frías del invierno, cambiamos la decisión. El mejor negocio es hacer maíz de segunda, pero siempre sin la presencia del problema de este insecto. Observando el contexto del día de hoy, nos asustamos un poco. Tendríamos que salir todos a hacer los controles, que lo haga uno solo no sirve y entre todos".
A su vez, recordó que el año pasado los resultaos "fueron muy malos. El rendimiento de indiferencia estaba entre los 4.000 y los 5.000 kilos por hectárea y tuvimos rindes de alrededor de 2.000 kilos de maíz. Fue un quebranto el maíz".
Fuente: Redacción Momento de Campo