Impulsan precios de referencia en la cadena láctea
Tanto la Federación Agraria Argentina (FAA) como la Cámara de Productores de Leche de Entre RÃos (Caproler) sostienen la necesidad de transparentar la cadena láctea: determinar qué porcentaje del precio final se lleva cada eslabón e implementar una pizarra láctea con precios de referencia.
Ya hubo tres intentos en la provincia pero las iniciativas quedaron truncas. En la reunión de conformación de la Mesa Lechera se planteó el tema: “es un muy buen dato para la actividad tener un precio de referencia y, si bien no es obligatorio que se pague ese monto, permite establecer un parámetro como ocurre con la carne, la soja o el maíz”, dijo a AIM el presidente de Caproler, Bernardo Berruhet.
Los abusos que se producen en la cadena láctea por parte de los sectores industrial y comercial y que perjudican a los tamberos, que cobran por debajo de sus costos, y consumidores, que deben pagar precios exorbitantes, generaron una serie de planteos desde las entidades que representan a los productores en relación con la necesidad de equilibrar la balanza.
Ante la crisis que atraviesa el sector, surgió una vez más la necesidad de fijar precios de referencia, de la misma manera que ocurre con otras actividades agropecuarias.
El presidente de Carpoler, Bernardo Berruhet, es uno de los que se pronuncia a favor de implementar una pizarra láctea: “en el precio de referencia ya hemos trabajado; tres veces intentamos en la provincia llegar a un precio de referencia”, recordó y sostuvo que en la reunión de la Mesa Lechera “se volvió a plantear, quedó en agenda para trabajarlo”.
“Hemos sido los primeros impulsores de los que fue precio de referencia en Entre Ríos”, aseguró el dirigente tambero. Hubo tres intentos. Dos veces se hizo con el Consejo Empresario de Entre Ríos (Ceer) y la última con la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Entre Ríos (Uner), donde el trabajo estuvo a cargo del contador Eduardo Muani, ex decano de la casa de estudios.
Sin embargo, la reticencia de uno de los sectores involucrados en la composición del precio de la leche trabó la iniciativa: “lamentablemente se llegó hasta cierto punto con el trabajo y después la industria no quiso seguir adelante”.
“En su momento, cuando ya estábamos para terminar de desarrollar la información que debe brindar la industria nos empantanamos y, lamentablemente, no se pudo conseguir”, lamentó Berruhet.
Sin embargo, el dirigente destacó que el trabajo realizado quedó en pie y podría tomarse como base. “Salió de nuevo el tema y veremos a partir de la Mesa Lechera de Entre Ríos si podemos llevarla a cabo. Es un muy buen dato para la actividad tener un precio de referencia y, si bien no es obligatorio que se pague ese monto, es un dato de la realidad, como ver lo que es la pizarra de la carne, de la soja o del maíz”, señaló.