Pese a las expectativas fue baja la retención de vientres
La cantidad de hembras faenadas en 2024, en especial las hembras jóvenes, encendió las alarmas de alerta.
En 2023 el stock nacional cayó en más de 1,5 millones de cabezas al pasar de 54,2 a 52,8 millones en stock al 31 de diciembre de ese año.
Pese a que las expectativas generadas después de la seca, gracias la mejora del clima y a que las proyecciones iniciales apuntaban a la retención de hacienda y la recuperación del stock, aparece un nuevo revés climático, frente a un contexto de fuerte presión en los costos y precios retrasados, terminó por neutralizar esas proyecciones y un nuevo año sin recuperación de vientres.
De acuerdo con los datos publicados por el Rosgan, si bien aún no se tienen las cifras oficiales de faena efectiva registrada por las plantas a fines de diciembre de 2024, el dato de movimientos de hacienda a establecimientos frigoríficos resulta un buen indicador.
Según la información que puede extraerse del SENASA, durante el mes de diciembre los envíos de animales a frigoríficos sumaron unos 1.229.596 cabezas en 2024.
Este dato, sumado a la estadística oficial de faena reportada hasta el mes de noviembre, indicaría una faena anual cercana a los 13,9 millones de cabezas, un 4,2% menos que lo registrado en 2023, año en que la faena superó los 14,5 millones de animales.
Según la misma estadística preliminar, de los 13,9 millones de animales faenados a lo largo del año que acaba de terminar, 2,63 millones fueron vacas y unos 4 millones fueron vaquillonas, cifra que no presenta disminución alguna respecto al pico de faena alcanzando en 2023 como consecuencia de la sequía.
De confirmarse estas cifras, cerca del 48% de la faena total (6,64 millones de cabezas) habrían sido hembras, lo que representa un nivel muy proclive a la liquidación, considerando que en 2023 -pleno año de seca- ese porcentaje fue del 48,1% y el stock de hembras perdió unos 900 mil vientres.
En números absolutos, al descontar la cantidad de vacas y vaquillonas faenadas durante el año, y asumiendo una reposición y mortandad de moderada a baja en ambas categorías, estimamos que las cifras finales del 2024 terminarán arrojando una nueva caída en número total de vientres útiles, que podría situarse entre los 500 mil y 800 mil vientres menos que los contados un año atrás.
En 2024 la faena se recortó en 700.000 cabezas de ganado vacuno
Recordemos que 2023 marcó uno de los períodos de mayor liquidación de hacienda, luego de 2008 y 2009, atravesados también por una severa y prolongada sequía con pérdidas de más de 10 millones de cabezas del stock nacional.
Durante 2023, el stock nacional cayó en más de 1,5 millones de cabezas al pasar de 54,2 a 52,8 millones en stock al 31 de diciembre de ese año, con una faena que creció en 1,1 millones de cabezas.
En 2024, la faena logró contraerse en apenas 700 mil cabezas, permaneciendo como una de las más altas de los últimos años, equiparables a los máximos conseguidos en los años previos a la pandemia.
Pero más allá del número general, lo que alerta es la cantidad de hembras faenadas en 2024, en especial las hembras jóvenes que, en otro contexto, podrían estar abasteciendo la reposición.
Si bien el número general de stock ganadero probablemente termine manteniéndose sin cambios al final de este ciclo que acaba de concluir, producto de una mejora esperada en los porcentajes de parición y destete, el hecho de no recuperar vientres productivos es lo que, genera mayor exposición ante aquellas variables que se encuentran fuera de nuestro control, como, por ejemplo, el clima.
Fuente: NoticiasAgropecuarias